Las Presillas
Situadas en el corazón de Rascafría, concrétamente en el Valle del Paular, Las Presillas es una de las piscinas naturales más populares de toda la Comunidad de Madrid. Un entorno 100% eco con piscinas construidas en piedra que guardan un agua totalmente clara y con el imponente perfil del pico Peñalara en el horizonte. Limpias, con amplias praderas y aptas para ir solo, en pareja o en familia. ¿Lo mejor de todo? El acceso a las personas es totalmente gratuito.
Las Berceas
Si tras pasar un agradable día en Las Presillas, te ha picado el gusanillo y quieres conocer otra piscina natural, te proponemos que pongas ruta a Las Berceas. Un verdadero paraíso oculto en el corazón de Cercedilla y rodeado de pinares. ¡Advertimos de que el agua está fresquita! Pero es debido a que es agua totalmente natural y eso hoy en día es un lujo a tener en cuenta. Además en sus 30 hectáreas de extensión podrás disfrutar de todo tipo de servicios y comodidades como merenderos, vestuarios, duchas, aseos, bar y enfermería. En 2017 permanecerán abiertos hasta el 3 de septiembre de diez de la mañana a 8 de la tarde. Y los niños solo pagan 4€ por acceder. ¡Venga, que ya tienes plan para el próximo fin de semana!
Las piscinas de Riosequillo
Para vivir un maravilloso día de sol y agua tendréis que acercaros hasta Buitrago de Lozoya. Las piscinas de Riosequillo con una auténtica zona recreativa para toda la familia que cuenta con áreas infantiles con columpios, zonas arboladas, merenderos, restaurante, vestuarios, aseos públicos y un gran aparcamiento. Los fines de semana abren de once de la mañana a 11 de la noche y os aseguramos que es uno de los mejores lugares a los que podéis ir para olvidaros del mundo.
Las Dehesas
Rascafría, Cercedilla…¿y la Sierra del Guadarrama no tiene donde refrescarse? ¡Por supuesto que si! Hablamos de las Dehesas, una verdadera joya con vistas a la sierra que hará que solo quieras remojarte y tomar aire fresco a pleno pulmón. Inaugurada en 1978 sus aguas tampoco alcanzan grandes temperaturas, pero como lo vas a agradecer cuando venga la ola de calor. Dispone de aseos públicos, vestuarios, bar, enfermería y unas vistas infinitas a la montaña que no tienen precio.
El Pantano de San Juan
Conocido como “la playa de Madrid” las aguas del Embalse de San Juan han protagonizado los veranos de miles de madrileños durante generaciones. Cuenta con 10 kilómetros de playa, así que tendrás espacio de sobra para colocar la toalla y la sombrilla. Pero este popular enclave también es ideal para la práctica de todo tipo de actividades acuáticas como el piragüismo, la vela o la pesca. ¿Qué más se puede pedir a tan solo media hora de Madrid?
